Postura dedicada a la divinidad Matsyendra, Señor de los peces. Cuenta la mitología hindú que un pez escuchó a Siva revelar a su consorte Parvati los secretos del yoga, Siva, percatado de la actitud del pez y convencido de que había aprendido los misterios relatados, lo trasformó en dios.
Ejecución, torsión a derecha
· Sitúa la postura como en el dibujo: pierna derecha flexionada y rodeada por el brazo izquierdo, la mano derecha retrasada y apoyada la palma en el suelo.
· El tronco ligeramente erguido en todo momento, sin exagerar el esfuerzo, sólo controlando.
· Cierra los ojos. Inspira y gira hacia la derecha el tronco y la cabeza.
· Mantén la postura durante cinco o seis respiraciones lentas.
Beneficios
· Estira el conjunto de la musculatura glútea y piramidal, por lo que beneficia la salud de la cadera y articulación sacroiliaca. Previene de dolencias de estas zonas, y en su caso las mitiga.
· Estira la columna vertebral lumbar y dorsal baja, desbloqueando las vértebras favoreciendo la salud de la espalda. Ejecutada con moderación es una postura muy recomendable.
· Procura un fuerte masaje de las vísceras pelvianas y abdominales.
Relaja el riñón y las suprarrenales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario